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Santurtzi mejora y sanea las instalaciones del frontón de Mamariga

Santurtzi mejora y sanea las instalaciones del frontón de Mamariga

El Ayuntamiento de Santurtzi ha comenzado la pasada semana las obras de readecuación y mejora del frontón de Mamariga. Se trata de unos trabajos de cierre y readecuación de dicho frontón para su nueva puesta en servicio en uso regulado, preservándolo así frente a su degradación por usos inadecuados y/o actos vandálicos recurrentes. De esta manera, los dos frontones municipales -Serantes y Mamariga- tendrán regulada de idéntica manera el uso del mismo y podrá seguir siendo utilizado de la misma manera que hasta ahora, previa reserva por parte de las personas interesadas, así como los colectivos culturales o vecinales del municipio.

Estas actuaciones consistirán en la instalación de puertas de acceso son sistema de teleapertura, que será controlado a través de Santurtzi Kirolak; limpieza de grafitis mediante pulido en aplacados de piedra y repintados en elementos metálicos estructurales; saneados y pintados de paredes y lateral del frontis y de la estructura metálica de cubrición…

Asimismo, se procederá a la reposición de los siete vidrios rotos por actos vandálicos, hechos que suelen repetirse con bastante asiduidad, se instalará red de fibra y marcador electrónico, además de llevar a cabo una limpieza mecánica del pavimento de la cancha y será rotulado.

El presupuesto global conjunto de todas las actuaciones y trabajos asciende a más de 60.000 euros, y el plazo estimado de ejecución es de mes y medio, quedando concluidas las obras para finales del mes de agosto.



Estas obras se enmarcan dentro de las actuaciones que el consistorio está acometiendo durante el periodo estival en diferentes instalaciones municipales deportivas y educativas, con el fin de interferir lo menos posible en la actividad.

Santurtzi Hoy

Desde Santurce a Bilbao vengo por toda la orilla, con la falda remangada luciendo la pantorrilla. Vengo deprisa y corriendo, porque me aprieta el corsé, voy gritando por las calles, quién compra, sardinas frescué…